“Y el Señor me dio hermanos…” Esta expresión de Francisco de Asís, hoy recoge muy bien la experiencia de inicio del postulantado con los siete jóvenes de distintas partes de la república que han decidido decirle si a Dios, después de un año de discernimiento vocacional; y que han sido acogidos con alegría en la fraternidad de La Piedad, Michoacán.
Alfredo (Orizaba, Veracruz), Ernesto (Puebla, Puebla), José Manuel (Mérida, Yucatán), Jonathan Miguel (Guadalajara, Jalisco), Jesse (Jesús María, Jalisco), Azarel (Xalapa, Veracruz) y Noé Alejandro (Tangamandapio, Michoacán) han recibido en la eucaristía, de manos del hermano Juan Miguel Subiza (delegado del custodio provincial) la Tau y el Evangelio como signo de esta forma de vida a la que quieren seguir configurándose a Cristo, caminando de la mano de Francisco de Asís.
En un ambiente fraterno hemos compartido los alimentos con los familiares y amigos de nuestros hermanos postulantes que los han acompañado. Damos gracias a Dios por estos hermanos, dones de su amor y misericordia para nuestro carisma y para la vida de la Iglesia. Que Santa María de Guadalupe siga acompañando su caminar y entrega a la vida del Santo Evagelio.